Bread and Puppet es una compañía de circo, títeres y teatro fundada por Peter Schumann en los años ‘60 en Nueva York. Desde hace ya bastantes años, están ubicados en Glover, Vermont, en una antigua granja donde tienen su taller, el teatro, un pequeño museo donde exponen material de sus funciones, ¡una catedral de papel maché!, un autobús que es una tienda y también, al lado, un campo donde en verano organizan sus pases de circo y desfiles a modo de procesión pagana por el bosque con banda de música, elenco actoral y unos títeres altos como un bloque de tres pisos. Al final del espectáculo, aparte del gozo de recibir una tormenta de verano, probamos el pan de ajo que hornearon para todes y pudimos contemplar los objetos que salen de su taller de serigrafía, fundado por Elka Schumann1– que no sólo produce materiales para promocionar y apoyar sus obras- y otras causas variadas inspiradas por la solidaridad-, sino también las enormes cortinas, banderas y otros elementos para la escenografía. En el autobús abandonado, encontramos además toda la producción de lo que Schuman llama cheap art – arte barato–. Entre otras cosas, el manifiesto2 que promueve un arte accesible a todes, que debe estar en todas partes porque está dentro del mundo; un arte que puede ser alimento, remedio, lucha contra la guerra y la estupidez, un arte para las cocinas y al que le gusta el pan ¡viva!
. En el autobús hay cientos de postales, telitas, periódicos con eslóganes variados. Tomé dos materiales- el objeto de la fotografía y otro con el mismo mensaje, pero en otra tela-, y dejé el importe en la hucha de recaudación, con la intención de regalarlos a dos personas queridas, compañeras, con las que pensamos, cotilleamos, leemos, compartimos la vida, disfrutamos y participamos del arte, y eventualmente, trabajamos juntas.
Gossip saves lives es una frase que usan colectivos transfeministas en referencia a la red de apoyo entre mujeres para acceder a la asistencia sanitaria, sobre todo en relación a la información sobre derechos reproductivos y aborto.
El cotilleo, la información proporcionada por canales no oficiales, históricamente ha sido también la manera de conseguir sustancias prohibidas o averiguar información relevante no proporcionada por canales oficiales – familia, escuela, administración-, y una vía de comunicación y construcción comunitaria fundamental en el caso de mujeres y personas queer. El cotilleo sucede en tu círculo de confianza, lejos de mecanismos de vigilancia, entre susurros, mientras se hacen las tareas o en un descanso entre ellas. Es el contrapoder por excelencia, la herramienta decisiva para combatir fake news y, una técnica – infravalorada afortunadamente y, por lo tanto, todavía efectiva- para crear lucha colectiva.
Denostado tradicionalmente por ser “cosa de mujeres” el cotilleo es el lugar donde todas aquellas personas a las que el sistema patriarcal y capitalista maltrata y desplaza, se encuentran y se ofrecen ayuda mutua en forma de información, medicinas, confianza, red.
En el podcast The Defenders, Samantha Bee y Gloria Rivera invitan a activistas e investigadoras a pensar juntas y compartir los actos de resistencia ante la derogación del histórico fallo Rome versus Wade en 2022 , e que en 1973 dictaminó que el derecho al aborto era una cuestión de privacidad constitucional y, por tanto, garantizado desde aquel momento en todos los estados de EEUU. Ahora, cada estado tiene jurisdicción sobre este asunto.
Uno de los episodios del podcast, se titula Gossip Saves Lives y en él conversan con asociaciones que están tejiendo redes de apoyo y de acceso a derechos reproductivos y a tratamiento médico en el valle del Río Grande, entre Texas y México, poniendo atención a la alianza histórica entre redes y comunidades de mujeres en ese territorio. Hoy en día este valle se ha convertido en una zona militarizada, en la que no hay posibilidad de desplazarse entre diversos núcleos urbanos a causa de los diversos checkpoints en el mismo Texas y en la frontera. Como explica Kathy, habitante del valle y trabajadora del Frontera Fund3, las personas que están indocumentadas en este valle y necesitan abortar están forzadas a la maternidad o deben asumir el riesgo de una deportación. Esta situación no solo aplica a los derechos reproductivos, sino a cualquier otro tratamiento médico, como los antibióticos, y al mismo acceso a la atención sanitaria. Nancy Cárdenas explica que el 90 % de los habitantes del valle de Río Grande son latines. Es un área que tiene una ratio alta de personas que no tienen seguro, que navegan en mucha inseguridad financiera, y donde muchas familias tienen un estatus mixto, con varios de sus miembros indocumentades a pesar de llevar décadas viviendo y trabajando en Estados Unidos. El acceso a la atención y tratamiento sanitario está ligado al estatus de inmigración y Nancy cuenta como, desde bien pequeña, conseguía medicinas para su familia y miembros de su comunidad, ya fuera por su situación de migración o su situación económica. Ahora, además, las personas tienen miedo de ir a sus citas con el médico, de recoger a sus hijes en la escuela, por la presencia de policía migratoria o federal en sus rutas habituales. La vigilancia es tan intensa que hasta es arriesgado compartir información, con varios juicios pendientes a asociaciones y activistas por informar sobre cómo conseguir tratamiento para abortar, así que siempre se trata el tema con sumo cuidado. Pero, aun así, se corre la palabra, como siempre ha sucedido. A lo largo de los años, se ha invertido la legalización del aborto, y ahora en México se reconoce este derecho mientras que en Texas está penado. Lo que se mantiene, siempre, es la red de apoyo entre mujeres que proporciona acceso seguro a este derecho, por las vías que sean: los chismes salvan vidas. Es una tradición cultural, la de mantenernos a salvo.
Así, este pie de foto expandido, toma inspiración en la palabra inglesa de caption– capturar- e intenta husmear en la esencia de esta imagen, del objeto retratado, de los motivos de quién hizo la fotografía. Quiere transmitir que el arte es también un lugar para que los mensajes se propaguen generosos, con la intensidad de un ser polinizador. Un lugar que, como el del cotilleo, existe desde el momento en que se convierte en motivo de encuentro, de conversación, y de pensar en la existencia en común.
Notas
- Ver: https://breadandpuppetpress.org/pages/about ↩︎
- https://breadandpuppet.org/cheap-art/why-cheap-art-manifesto ↩︎
- En el podcast “The Defenders” titulado Gossip saves Lives: https://lemonadamedia.com/podcast/gossip-saves-lives/ ↩︎
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