Apolonio Avariju Portillo
Nació en la Comunidad ava guaraní Yakãju (Colonia Fortuna, Canindeyú, Paraguay), el 9 de febrero de 1973. Hijo de Ava Tape Mirĩ Portillo y de Verónica Kuña Takuaju Aguirre, era horticultor y oficial de obras, y realizaba pequeñas piezas en madera, como el angu’a (morteros) además ajaka (cestos).
En el año 2000 migró a Asunción en búsqueda de tratamientos médicos para su esposa Daniela Martínez, que fue atendida en el Hospital Militar. Allí, un médico italiano le alentó a producir piezas en madera. Portillo elaboró tallas zoomorfas de pequeño formato (de diez a quince centímetros), adquiridas por el médico, que luego le solicitó más piezas y de mayor formato. La demanda aumentó y también el precio de las piezas, sobre todo las de carácter funcional.
Actualmente reside en la Segunda Compañía Laurelty de Luque (departamento Central), y se dedica por completo a la talla en madera. El autor elabora piezas zoomorfas, representaciones de armadillos, tortugas, peces, yacarés, víboras, en ocasiones con forma de apyka (banqueta); y, excepcionalmente, ñandúes, tucanes y guacamayos. Debido a la demanda, en ocasiones elabora piezas exóticas: jirafas, elefantes, aunque prefiere las especies autóctonas.
En términos técnicos, el artista trabaja con el ygary (cedro, Cedrela fissilis) y kurupika’y (Sapium glandulosum). Su trabajo parte de maderas encontradas, cuyos formatos son aprovechados, para la estructuración de la pieza. El artista realiza la talla con machete y cuchillo, y concluye la pieza con pirograbado eléctrico.
El artista Salustiano Portillo era su primo, y en su entorno familiar muchos se dedican a la talla en madera, entre otros: Catalino Portillo, Dionisio Aponte, Herminio Martínez y Milciades Guimarães.
Antes de la pandemia inició proyectos de enseñanza de la talla a niños de comunidades indígenas urbanas ava y mbya guaraní asentadas en Luque, por el lapso de cuatro meses en cada comunidad.
También ofertó sus piezas en las ferias del Instituto Paraguayo de Artesanía.